El hotel te ofrece aparcamiento, sin embargo al llegar no tienen, sino que un convenio con un señor que tiene un parking a dos cuadras del hotel, te piden que las toallas las dejes limpias, porque si encuentran alguna mancha te cobran 30 dólares de recargo, sin embargo las sábanas están manchadas, luego si algún mueble está dañado a tu salida tienes que pagar más recargos, pero no tienen en cuenta que la estructura de su hotel está en mal estado; la pintura descascarada y tornillos sobresaliendo de la pared debajo de la almohada( con el que me golpee en la noche), si sales muy pronto(antes de las 6) otro recargo.
La chica de la recepción cero empatía…
Al día siguiente al check out pedimos hoja de reclamación y lo que nos hizo fue decir “escribe en esta hoja en blanco”, que no tenían hojas de reclamación, pedí una nuevamente y se fue por 10 minutos a buscar una y cuando nos cansamos de esperar porque teníamos que seguir con nuestro viaje, bajamos y estaba hablando con sus otros compañeros en la cocina del restaurante de abajo.
No lo recomiendo para nada. Solo quieren sacarte dinero en recargos por cualquier cosa por mínima que sea. He estado en hostales con muchísima mejor atención y empatía con el cliente.
