Una experiencia bastante mala, en primero lugar pone que la entrada es a partir de las dos pues a esta hora no habían recepcionistas y a pesar de llamar al timbre que tienen tardaron mucho en llegar, en segundo lugar la habitación se abre y se cierra con una llave antigua y al salir no se ancla cosa que no nos dijeron y a día de hoy se debería avisar, en tercer lugar los colchones no eran mal malos porque no se podía, se notaban cada uno de los muelles, en cuarto lugar pone que se come genial bien pues el restaurante cerrado al igual que la piscina y podía seguir con una larga lista.